La historia del cóctel El Presidente está ligada a un ciudadano cubano muy particular: el presidente Mario García Menocal, quien presidió el país de 1913 a 1921. Menocal recibió formación educación en Estados Unidos y se transformó en un héroe en la guerra contra España. Este cóctel, como es de esperar, nació del ron cubano y muchos barmans prefieren utilizar un ron Oro como base. Mezclar con una bebida espirituosa que tenga madurez y delicadeza es, sin duda, una excelente idea para una bebida que había sido considerada la “aristócrata de los cócteles” por el corresponsal y documentalista de cócteles de la época, Basil Woon. En 1928, Woon escribió “When It’s Cocktail Time in Cuba” (Cuándo es la hora del cóctel en Cuba), en el que plasmó un retrato del ambiente de La Habana de la época. Imaginemos una escena animada de la cultura del cóctel y la energía imparable de tantos expatriados, que viajaban hasta el país más cercano donde beber alcohol todavía era legal.

Documentado por primera vez en 1919 en el “New York Evening Telegram” y posteriormente en 1924 en el “Manual del Cantinero” de León Pujol y Oscar Muñiz, tanto el creador de El Presidente, como su fecha de creación, no están precisados con exactitud. Eric Felten señala en su libro “How’s Your Drink“, de 2007, que lo más probable es que se haya originado en el Club Vista Alegre de Santiago de Cuba durante los años 1910 – 1920. El Vista Alegre era un club de cócteles americanizado que atendía a estadounidenses de alto poder adquisitivo, que escapaban de la Ley Seca. El otro posible candidato es el Hotel Sevilla de La Habana, dirigido por el reconocido Eddie Woelke, en los años 20.